Nuestros peques están creciendo sobre valores que harán que sean, como ya son, grandes personas.
Así resultó nuestro mercadillo Navideño Solidario.
Mil GRACIAS a todos los que acudisteis, para los niños era muy importante y estaban muy ilusionados con la propuesta.
La SOLIDARIDAD es un valor que se debe trabajar desde la etapa infantil. Así, a partir de los 2 años de edad, los niños ya han desarrollado una conciencia sobre la existencia de otros, y son capaces de afrontar tareas como ayudar y colaborar.
Sin duda, la solidaridad es una muestra de altruismo que se aprende y se fortalece con los años de desarrollo, que convertirán a los más pequeños en personas capaces de establecer relaciones de confianza, en las que la reciprocidad, entendimiento, comprensión y afinidad son protagonistas.
Debemos tener en cuenta estos consejos para educar en la solidaridad a los niños:
El EJEMPLO. La solidaridad se transmite y se aprende, sobre todo, con el ejemplo. Mostrando actitudes solidarias los adultos conseguiremos que los más pequeños interioricen su valor.
La EMPATÍA. Es posible que aprendan a ponerse en el lugar de los demás a partir de los 2 años. Es el mejor momento para empezar a inculcar el valor de la solidaridad.
Un ENTORNO POSITIVO. Para promover valores como la solidaridad debemos aportar a los niños entornos afectivos y comunicativos siempre positivos, en donde sientan libertad para expresarse y se sientan escuchados.
Mostrar lo que se consigue al ser solidario. Comentar todo lo bueno que ha logrado alguna persona al desarrollar una labor solidaria les hará entender su importancia.
Con la SOLIDARIDAD los niños sabrán trabajar en equipo, compartir, respetar a los demás, ceder cuando sea necesario y, en resumen, convivir. Pero la solidaridad hay que enseñarla en la vida cotidiana para que acaben superando sentimientos individualistas y egoístas que suelen aparece en los primeros años.